Más cine y algo de fotografía...

Últimamente tengo un montón de cosas en la cabeza, y desgraciadamente, poco tiempo para escribirlas, porque en el trabajo ando un poco estresada (mejor estresada que aburrida, pero todo tiene un límite), todo ello sin contar con los esfuerzos que hago para no contestar mal de vez en cuando, que estoy segura me van a valer una úlcera.
Pero vayamos por partes... para empezar, las fotos, que las he organizado en una página de álbumes de fotos que, de momento, recomiendo. Me está costando sangre sudor y lágrimas colgarlas gracias a la conjunción entre mi ordenador maltratado y la conexión wifi más-caprichosa-no-se-puede, así que espero que os gusten... Empezaba a estar harta de tener el blog lleno de links, y así me da menos pereza colgar un montón de fotos.
En realidad, cuando las cuelgo, me acuerdo de las fotos que encontrábamos cuando buscábamos para el santuario... siempre me preguntaba qué tipo de persona comparte sus cosas con el mundo... y miradme dónde estoy ahora. Igual alguien se pone a hacer un santuario en Australia y acaba colgando una foto de las mías (en la que espero no salir!)... seis grados de separación.
Y siguiendo por partes, toca cine, gracias a este estupendo festival. Veamos, ahora mismo acabo de volver y vengo hiperactiva, no porque la peli me haya gustado especialmente, sino porque la primavera da señales de llegad inminente... El caso es que la peli... yo no pierdo la esperanza con las películas francesas, porque las que me gustan, me gustan taaaanto.... Pero comento primero la del jueves, que el orden cronológico siempre me ha gustado (por más que Cronos a lo de la lógica no le dé mucho).

El jardinero fiel
Tremenda película. Me ha gustado todo de ésta. Me ha gustado la actuación, la fotografía, la banda sonora, la trama y el guión... todo. He de reconocer que iba sin fe, porque LeCarré me cae gordo (no así Forthsythe), aunque le regalamos el libro a mi hermano, y lo recordaba porque me gustó mucho el título; pero no puedo juzgar porque no he llegado a leerlo.
Lo que más me ha gustado ha sido el retrato real de África que se hace, más allá del glamour que suele envolver estas historias de espías... Hace un retrato de la diplomacia y la ayuda humanitaria que me parece mucho más real de nada de lo que he visto hasta ahora (El sastre de Panamá ya iba por ahí, dejando un poco de lado la elegancia y mostrando lo que hay detrás de ella). Plasma un poco el tremendo desencanto y la impotencia que rodean cualquier tema de ayuda humanitaria, negociación y cualquier cosa en general que se dirija a mejorar el mundo. Me recuerda también a las cosas que me gustaron de La intérprete; a pesar de haber tenido mi iluminación acerca de mi futuro profesional en la diplomacia, siempre he sospechado que detrás de las apariencias, la diplomacia no era tan glamourosa como parecía, y los espías debían estar muy desencantados hoy en día. Siempre lo digo, pero es más por recordármelo que por otra cosa, la vida es mucho más prosaica.
Diría que esta visión se plasma perfectamente en la evolución del personaje de Ralph Fiennes (Quayle), que sufre la doble ironía del título (lo siento, pero no quiero destripar nada, así que no diré más sobre ello) y se va dando cuenta de que, como los muertos de El sexto sentido, y como todos, no veía lo que no quería ver.
A nivel técnico, me ha parecido una película fantástica: el guión muy bien adaptado, te tiene en el borde del asiento, pero te deja lapsos para que supongas cosas, cuadra con la difinición que hizo uno de mis amigos teatreros de El señor de los Anillos: carrera-carrera-carrea-elfos-carrera-carrera-carrera-elfos... como no he leído el libro, no sé si deja algo de trasfondo; pero logra describir la situación real sin perder de vista la trama en ningún momento. La fotografía y la banda sonora me han encantado... en especial la fotografía, porque mezcla momentos de casi documental con las entrañables (y consabidas) grabaciones caseras (pero es que son así) y con los momentos de tensión... por no hablar de la fotografía de paisaje, espectacular. La banda sonora me recordaba un poco a la de Memorias de África, con coros de voces blancas e instrumentos africanos, pero muy buena; no me ha parecido de óscar, de todas formas.
Lo mejor, la actuación de Fiennes que cada vez me gusta más (ahora tengo que verla en inglés de todas formas); lo que no me ha gustado, que la trama es demasiado prevedible en dos momentos importantes. Pero no se pierde tanto...



Angel A
Como decía, no pierdo la esperanza con las películas francesas, y ésta prometía mucho, pero me ha decepcionado muchísimo el final... recomiendo ir a verla y salir cinco minutos antes dle final. Así, el sabor de boca será estupendo... El argumento está bastante manido (yo lo pondría con "el golpe del siglo" "los intercambios de cuerpo" y "los niños/animales que lo saben todo"), pero no por ello deja el guión de tener detalles originales; como la forma en la que se presenta el ángel (ella misma lo dice), que no tiene nada que ver con el gordinflón bonachón de Qué bello es vivir. Por otro lado, la vivacidad de los diálogos me ha gustado mucho: lamentablemente no la he visto en francés (y tampoco sé si la habría entendido, pero bueno). En general son muy buenos, aunque a veces hay cambios de personalidad que no me convencen especialmente... demasiado dulce debajo de la ironía... pero hace sonreír en un par de ocasiones.
Tiene detalles, como la conversación con el empleado en el consulado americano, los rumanos en el parque,
que no tienen nada que ver con el argumento, y que deberían haberse camuflado mejor, en el caso del primero, es gracioso, en el segundo, no tanto.
Me gusta el hecho de que esté rodada en blanco y negro (que en realidad es en la más amplica gama de grises que se pueda imaginar, es bonito pensarlo), porque está muy logrado el ambiente irreal, y a la vez retrata una París que es hermosa e indiferente a la vez. Facilita además que Rie aparezca especialmente sobrenatural (amén de los veinticinco cambios de maquillaje a lo largo de la película, que no le hacen ningún bien a las escenas, los cambios son demasiado bruscos), claro, que el efecto ya estaba conseguido con la cabeza y media que le saca al pobre Debouzze.
Lo que menos me ha gustado de la película han sido los demasiados cambios, el ritmo no es constante y da la sensación de que se quedan siempre cabos sueltos. Lo que más me ha gustado son algunos diálogos, como el del parque de las Tullerias, el de la riba del Sena... ah, y los gestos contundentes de Rie Rasmussen.
Viendo la filmografía del director (Luc Besson), confirmo lo que había sospechado, ella me recordaba a la chica de El quinto elemento, que tiene los mismos componentes de surrealismo y cambio.
Me pregunto por qué a los franceses les gusta tanto el surrealismo en todas sus formas...


Y de momento, creo que esto es todo lo que tengo que decir sobre este tema... mañana ya veremos qué película veo; si pudiera votar aquí, ahora mismo votaría a Beltroni, a pesar de ciertos asuntos sospechosos que me han comentado acerca de las multas... total, por lo menos éste se ocupa del cine, aunque no se ocupe de las aceras...
Ah, nota bene, dentro de la oferta cultural romana, tengo que averiguar cuándo es la Noche blanca, para ver los museos por la noche, que tiene una fascinación particular...
Y tengo que ir pensando en la maleta, para partir el jueves hacia la residencia paterna....

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
No solo debes valorar el trabajo de Ralph, la interpretacion de Rachel es lo mejor que he visto en mucho tiempo, tanto por su actuacion como su deslumbrante imagen ante la ´cámara...
A escalado puestos entre mis 3 peliculas favoritas y el libro no esta nada mal, que aunque no te guste Le Carre, a mi sí.

Uapero J, volviendo a los orígenes
Lilith ha dicho que…
Aaaay, hombres, que confunden las buenas actuaciones con los buenos aspectos. En fin. Tampoco es que la muchacha lo haga mal, pero es mucho más de oscar él!
Tendré que pedirle el libro a mi hermano, para ver en qué han cambiado el guión.

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